Apreciado/a compañero/a,
Ha llegado el momento de cerrar una de las etapas más enriquecedoras y bonitas de mi vida. Finaliza aquí mi trabajo al frente de la Federación Canaria de Automovilismo, una posición que durante los últimos cuatro años he intentado defender con responsabilidad, trabajo y máxima dedicación.
Como bien sabrás, la asamblea general nacida de los recientes comicios de la FCA decidió elegir al compañero José Ángel Batista como nuevo presidente de la entidad. Le he trasladado mi felicitación personal y mis mejores deseos de éxito y prosperidad para todas las decisiones que adopte a partir de ahora. Se avecina un nuevo tiempo, un proyecto que espero aporte al automovilismo canario las respuestas que necesita para seguir avanzando en la buena dirección.
Quiero aprovechar estas líneas para agradecer públicamente el trato inmejorable que he recibido durante estos años por la amplia mayoría de hombres y mujeres que conforman nuestro deporte, tanto en las Islas como fuera de ellas. He tenido la suerte de ocupar un cargo de altura, con orgullo pleno pero también con máxima responsabilidad, pensando siempre en los problemas de nuestros deportistas, clubes, escuderías, federaciones, comisarios y de otras tantas realidades vinculadas al motor.
Créeme si te digo que, pese a la adversidad de la pandemia del coronavirus, y a otras muchas complicaciones del día a día, el resumen de mi paso por la FCA lo valoro como una página llena de aspectos positivos, con muchas cosas mejorables, pero también con titulares sobresalientes, nacidos del esfuerzo colectivo de todos y todas, incluidas las firmas patrocinadoras, medios de comunicación y aficionados, piezas también muy importantes para garantizar el éxito de cada proyecto deportivo que hemos venido realizando.
Después de treinta y nueve años de dedicación plena a este deporte toca decir adiós. Me marcho con una mochila llena de recuerdos, de experiencias y de gente fenomenal. Quiero darle las gracias a mi junta directiva de estos últimos años y a todos los asamblearios que me han acompañado en esta aventura que ahora termina.
Con muchas limitaciones, pero también con una pasión arrolladora, he intentado defender y localizar soluciones para los múltiples problemas que
se venían sucediendo, acompañando en la medida de mis posibilidades y tendiendo la mano en cada isla del archipiélago. Por eso me voy tranquilo, agradecido y preparado para iniciar una etapa más serena y sosegada, donde la familia y los amigos ocuparán por fin buena parte de mi tiempo.
Fue un placer representarte, alzar la voz en tu nombre y liderar este periodo como presidente de la Federación Canaria de Automovilismo. Perdona mis errores y acepta mi ayuda si en el futuro llegara a servir para beneficio del motor. Espero que sigan construyéndose respuestas positivas para nuestro deporte, desde la unidad y el consenso, con dirigentes cercanos, empáticos y entregados en cuerpo y alma al liderazgo que merece el motor en Canarias.
Un abrazo y hasta siempre.
Benito Rodríguez Rodríguez